ISIDRO GONZALEZ REVILLA
Durante dos generaciones se ha estado trabajando con un único objetivo: crear productos ibéricos naturales y de una altísima calidad.
Esta pasión y este afán de perfeccionismo se ha ido pasando de Isidro Gonzalez Revilla a sus dos hijos Isidro y Belén hoy en día la cabeza visible de esta empresa que es una familia.
Para crear un producto tan selecto y óptimo y de esta calidad inigualable es necesario una correcta alimentación del cerdo, viviendo en completa libertad en las dehesas.
Actualmente Isidro Gonzalez Revilla localiza su actividad en dos puntos. El primero el más relevante estratégicamente por la zona de ibéricos en la que nos encontramos es Guijuelo. Este pueblo conocido mundialmente por sus productos chacineros se aprovecha de su cercanía a la Sierra de Béjar donde consigue un proceso de curación óptima para sus productos ibéricos gracias al aire puro y el frío, que hacen madurar dicho producto hasta conseguir la excelencia. El segundo lugar es Fuentes de Béjar a escasos 3 km. de Guijuelo. Aquí se aprovecha de las mismas condiciones meteorológicas de Guijuelo para el proceso de curación del embutido y a su vez se respira la tranquilidad tan necesaria en el día a día.
Una de nuestros aspectos más positivos es la consecución del control directo del ciclo de producción desde la selección y cría del cerdo hasta la elaboración y curación final del producto consiguiendo con ello niveles máximos de calidad.
LA DEHESA.
Los cerdos de Isidro Revilla viven en libertad en la dehesa, alimentándose principalmente de bellotas, imprescindibles para la alimentación óptima en la dieta del cerdo.
Esta alimentación basada primordialmente en bellotas lo que produce es una mayor presencia de ácido oleico en los jamones de dicho animal.
Estas grasas son beneficiosas para el colesterol ya que ayudan a reducir el colesterol «malo» y crean colesterol «bueno».
El porcentaje de ácidos grasos insaturados en los embutidos del cerdo ibérico alimentado con bellotas es mucho mayor que el de otras grasas animales y algunos vegetales, lo que hace que la carne del cerdo de bellota sea considerada como una de las más cardiosaludables.
Además de este efecto beneficioso sobre el colesterol, el jamón ibérico proporciona, vitaminas B1, B6, B12 y ácido fólico muy beneficiosas para el sistema nervioso. También es rico en Vitamina E, un poderoso antioxidante y está muy ligado a procesos de anti-envejecimiento.
A su vez al estar el cerdo pastando por el campo provocan que el cerdo realice ejercicio diariamente l oque a su vez genera una serie de particularidades del cerdo ibérico:
– Patas traseras largas y estilizadas
– Morro largo y fino
-Cabeza pequeña
-Carnes ricas en ácido oleico
EL CERDO IBÉRICO
El cerdo ibérico es una raza de cerdo cuyas características le distinguen morfologicamente de cualquier otra especie porcina. Tiene su origen en una subespecie mediterránea del jabalí ( Sus Scrofa Mediterraneus) y se extiende por la zona suroeste de la península ibérica.
Animal adaptado a las condiciones medio ambientales de la dehesa arbolada. Es un animal de tamaño medio, piel oscura y pigmentada, con variaciones que van del negro, al rubio o retinto, con pelo débil y más bien escaso, hocico afilado y patas finas y largas. Es un buen ejemplar, la espalda, dorso, grupa y jamones deben ser de musculatura manifiesta. Sus patas son finas y resistentes y con pezuñas de coloración oscura, salvo algunas excepciones.